8 de diciembre de 2019
Trabajadores de ´Cortinas Esteban´ aseguran que “nos están presionando con que no nos van a pagar para que nos vayamos de la fábrica”
El delegado Julián Dobal cuenta las novedades en la planta fabril luego de 60 días de permanecer cerrada. “Quedamos alrededor de 40 trabajadores, cumpliendo el horario y ya nos dicen que no nos van a seguir pagando el salario. Quieren que lleguemos a un acuerdo y que nos vayamos”, dice con pocas expectativas. “Cortinas Esteban” cerró sus puertas sin explicaciones y el empresario afirma no tener plata
(Moreno, 08.Dic.2019 / A1 Noticias) De casi un centenar de trabajadores y empleados que tenía en su plantilla la fábrica de aberturas de La Reja, hoy solamente resisten en su interior “alrededor de 40 trabajadores”, dice Dobal. Recordando que en principio “había una esperanza de que viniera algún inversor para reactivar pero esto se cayó, la fábrica definitivamente va a cerrar”.
El puñado de trabajadores que sostiene el reclamo cumple “con el horario de trabajo de 9 horas, no estamos haciendo una ocupación completa de la empresa”, aclaran. Durante la noche hay “dos compañeros hasta las 6 de la mañana y la consigna es que no saquen nada, porque nos dicen que nos pagarían la indemnización con la venta de las maquinarias”.
Los últimos ingresos para cobrar las quincenas fue producido por “los propios operarios que hicieron unos molidos para perfiles, y los elementos que se retiraron de la planta fue con consentimiento nuestro”, explica el delegado fabril. La única propuesta realizada por el empresario es pagar la indemnización “a los que estamos adentro en tres cuotas, pero el temor es arreglar y que cuando firmemos nos den solo la primera cuota y que las demás cuotas no las paguen. Si no nos pagaban con la fábrica funcionando, con la fábrica cerrada es medio complicado”, sostiene.
El conflicto se inició la mañana del 7 de octubre, cuando los obreros se encontraron con la fábrica cerrada. En ese momento había casi un centenar de empleados, “hoy solo quedamos 40 trabajadores resistiendo”, aclara Dobal. “A los afiliados a UOCRA les dieron una tarjeta del Fondo de desempleo, pero solo estaba la mitad del depósito, eso significa que están de juicio; a los de Comercio, que eran los menos también les pasó lo mismo, no se le permitió iniciar el juicio y los que pertenecían a Viajantes también”, detalla.
“Nosotros éramos el gremio mayoritario, 46 en su momento y ahora quedamos 38, los demás consiguieron trabajo y se fueron”, explica el obrero que se muestra “muy preocupado porque la mayoría de nosotros tenemos más de 20 años de antigüedad acá. Quizás podamos recibir un dinero que nos ayude a tirar, pero se nos va a hacer difícil conseguir trabajo. Nos queda la incertidumbre que si nos vamos de la fábrica, las otras dos cuotas es obvio que esta gente no nos la van a pagar”, se sincera.
Con los trámites administrativos agotados, la mayor esperanza de los pocos trabajadores que resisten el cierre definitivo de Cortinas Esteban es que “cuando asuma el nuevo gobierno tenemos un poco de ayuda, que se acuerden de nosotros de alguna otra manera”. Dobal recuerda que durante “la segunda presentación ante el Ministerio de Trabajo, hubo una empresa que quería asociarse, hablaron con nosotros y parece que cuando vieron los números de la empresa de cómo estaba decidieron no invertir”.
La realidad social se complica cuando el jefe de familia se queda sin trabajo y esa parece ser la situación que más afecta a los empleados de la firma de La Reja, “la mayoría de los compañeros tienen 3 o 4 hijos en edad escolar y la verdad que se complica porque el único ingreso que tenían hasta ahora era del papá, hasta ahora cobramos la quincena a los ponchazos, a partir de ahora si no acordamos se complica de verdad porque no tendremos más ingresos”, sostiene.
Julián Dobal reconoce el acompañamiento “del gremio de la madera de La Matanza, que continuamente está con nosotros, también nos acompañó la CGT Regional Moreno, con Walter Correa a la cabeza y Marcelo Cosme, muchos gremios de la zona no apoyaron y de la parte política, Lucas Franco, que ahora asume como concejal, él ha venido. Hemos tenido el apoyo de mucha gente, por los menos no nos han dejado solos”, agradece. La última expresión del trabajador es de esperanza afirmando que “quizás deberíamos hacer un poco más de ruido, nosotros siempre confiamos en que se iba a reactivar”, finaliza.